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Cada año, cuando se acerca el 31 de octubre, el mundo se sumerge en la enigmática celebración de Halloween. Más allá de disfraces coloridos y dulces que iluminan las calles, esta festividad encierra un misterio ancestral, conectando el mundo de los vivos con el de los muertos.

En este artículo, nos adentraremos en el origen y el profundo significado espiritual que rodea a esta festividad, explorando su historia y trascendencia.

Halloween: orígenes celtas

Este se remonta a la antigua festividad celta de Samhain, una conmemoración que marcaba el final del verano y el comienzo del nuevo año celta durante el solsticio de otoño.

Los celtas creían que durante esta época los espíritus de los difuntos caminaban entre los vivos, motivo por el cual realizaban rituales y se disfrazaban para protegerse de los espíritus malignos.

Samhain era un tiempo de conexión con los antepasados, donde se honraba su memoria en festividades familiares y actos religiosos purificadores.

Un momento para conectar con otros mundos

En esta fecha, se cree que el velo que separa nuestro mundo del reino de los espíritus se vuelve más tenue. Una antigua creencia sostenía que durante Halloween, las almas de los difuntos podían comunicarse brevemente con los vivos, facilitando un vínculo temporal entre ambos mundos.

Esta festividad tomó fuerza en Estados Unidos a partir de la llegada de inmigrantes irlandeses en la década de 1840.

Posteriormente, con la realización del primer desfile en 1921 en Minnesota y la influencia de series enigmáticas en los años 70, esta festividad se arraigó en la cultura estadounidense.

A lo largo del tiempo, ha trascendido fronteras y se ha fusionado con otras festividades, como el Día de los Muertos en México, generando una combinación única de tradiciones y rituales.

Reflexión y conexión espiritual

Más allá de los disfraces y la recolección de dulces, esta celebración conlleva una profunda conexión con el mundo espiritual.

Este momento invita a la reflexión sobre la vida y la muerte, permitiendo honrar y recordar a los seres queridos que ya no están entre nosotros.

Es una festividad que nos lleva a reflexionar sobre nuestro legado y la conexión con nuestros antepasados.

El significado espiritual de Halloween se encuentra en su capacidad para recordar y honrar a aquellos que nos precedieron, conectándonos con la esencia de la vida y la muerte.

Es un momento en el que la transición entre ambos mundos se vuelve más permeable, facilitando la comunicación y la reflexión sobre nuestra existencia.

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